estos animales celestes
construcciones que encandilan con su blanco ártico
proyectan su sombra sobre los árboles inquietos del fondo marino
caen infinitamente, sin dar con el suelo
simulando un vuelo pacífico
engañando a los poetas inocentes
haciéndolos creer que son dueños de su gracia
cuando en realidad
les están arrebatando la totalidad del cielo
leones, elefantes gritando
blancos, grises, azules, rojos amarillos y naranjas
las nubes de agua
las hormigas desesperadas
transportan palitos
leones, elefantes retorciéndose de dolor o alegría
el aguacero, la tormenta, los rayos
las fotos
(los arboles, ojos entrecerrados,
fueron encadenados por una cinta de niebla)
las fotos y el cielo corrompido
enemigas del alma
pocas las manos
tibio mi recuerdo
frío mi ojo
destinado a ver techos
construcciones que encandilan con su blanco ártico
proyectan su sombra sobre los árboles inquietos del fondo marino
caen infinitamente, sin dar con el suelo
simulando un vuelo pacífico
engañando a los poetas inocentes
haciéndolos creer que son dueños de su gracia
cuando en realidad
les están arrebatando la totalidad del cielo
leones, elefantes gritando
blancos, grises, azules, rojos amarillos y naranjas
las nubes de agua
las hormigas desesperadas
transportan palitos
leones, elefantes retorciéndose de dolor o alegría
el aguacero, la tormenta, los rayos
las fotos
(los arboles, ojos entrecerrados,
fueron encadenados por una cinta de niebla)
las fotos y el cielo corrompido
enemigas del alma
pocas las manos
tibio mi recuerdo
frío mi ojo
destinado a ver techos
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